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Conoce la diferencia entre códigos de barras GS1 vs códigos piratas

Códigos de barra GS1 vs códigos piratas

Conoce la diferencia entre códigos de barras GS1 vs códigos piratas. ¿Alguna vez escuchaste ese dicho que dice “lo barato sale caro”? En la vida hay muchas situaciones a las cuales podemos aplicarlo, y una de ellas es a todo lo referente con los códigos de barra piratas.

Obtener un código de barra pirata puede salirte caro, aunque su inversión inicial sea mucho más cómoda para tu bolsillo. Con ellos perderías los beneficios de contar con códigos únicos, legales y estandarizados que te abra las puertas a la exportación, a las grandes cadenas comerciales y el e-commerce; todo esto sin contar que es muy probable que te ganes un par de problemas de tipo legal ya que puede que, incluso, estés usurpando el código de barras correspondiente a algún otro producto o servicio que sí esté registrado según todos los lineamientos y parámetros.

Los Códigos de barra GS1 son más que líneas y números

Existen muchos sitios en internet que ofrecen a la venta y creación de códigos de barra por un costo muy bajo, los cuales no están estandarizados y  a su vez no contienen ninguna información. Debido a ello estos códigos no pueden ser capturados por los sistemas de rastreo de las empresas de logística y envíos, o los escáneres en las cajas registradoras de las tiendas.

Debido al alto porcentaje de desinformación, muchos emprendedores y propietarios que se encuentran en miras de crecer y empezar a vender a las grandes cadenas comerciales, así como también a exportar, recurren a estos falsos emisores de códigos de barra, y cuando finalmente llega el momento de entregar sus mercancías en los destinos ideales se topan con el rechazo.

Esto, por consecuencia, supone el hacer una inversión adicional que pueden llegar a afectar las finanzas del negocio, ya que será necesario cambiar todos los empaques o, al menos, re-etiquetarlos para agregar códigos legales y válidos que son emitidos por GS1.

“Muchas de las veces esos códigos no son estandarizados y la cadena (comercial) los rechaza, por lo que tienen que acudir con nosotros a adquirir los códigos estandarizados. Aproximadamente 98 por ciento de los productos en cadenas de autoservicio cuentan con código de barras estándar”, relata Mario Sequeira, subdirector de cuentas clave en el GS1 mexicano.

Tener un código de barra no se trata solamente de conseguir una etiqueta con barras blancas y negras con números debajo que se pegan a los empaques. Esta imagen, aparentemente tan simple, representa una codificación regulada y estandarizada, por lo cual, si se desea adquirir uno para algún producto, se debe acudir a una organización internacional encargada de emitirlos.

En este caso, la asociación que emite códigos de barra en Latinoamérica y otros países es el GS1, cuya labor principal es asignar a cada empresa, marca, comercio u organización un código de identificación individual que se acompaña a su vez de otros números para identificar cada uno de sus productos a nivel mundial.

Esto permite que las empresas tengan acceso a las grandes tiendas minoristas y departamentales que les solicitan la codificación de productos para agilizar las operaciones logísticas, facilitar el control de los inventarios y también el reabastecimiento según el momento preciso, entre otras operaciones beneficiosas.

¿Cómo se puede saber si los Códigos de Barra son realmente GS1?

Si cuentas con productos formalmente registrados, pero a su vez no estás seguro de la validez de sus códigos o de si están vigentes, lo primero que debes hacer es contactar  a la GS1 por lo canales disponibles (mail, web, números telefónicos)  para que te den información y te proporcionen las claves de acceso necesarias para descargar tu estado de cuenta, o una carta que declare la total validez y vigencia del registro.

Ahora, si los datos del código no coinciden con la descripción del producto y la empresa que te menciona GS1, se está ante la presencia de un código pirata.

También existe una manera adicional para corroborar la información, y es ingresando al siguiente enlace del GS1: http://gepir.gs1.org/index.php/search-by-gtin. Allí simplemente se debe colocar el código de barras que se tiene, y la página te dará como resultado el nombre de la empresa a la cual le pertenece, pudiendo así hacer posible identificar si ya se encuentra asignado, y si este lo está, también es un código pirata.

Ya en este punto es importante mencionar que el costo de la inscripción y de la renovación anual de una membresía a la asociación del GS1 siempre es proporcional al volumen de facturación del negocio, por lo que esto probablemente no resulte una carga financiera abruptamente pesada para los dueños, encargados o propietarios.

Beneficios específicos de usar códigos de barra oficiales

Aunque ciertamente las bondades de usar códigos de barra que sean otorgados y certificados por el GS1 son tantas que merecen una lista aparte con todos los detalles y datos pertinentes, sí existen algunas bondades específicas que los códigos pirata no pueden ofrecer hasta el momento, como por ejemplo:

-Agilizar todos los procesos logísticos referentes a la distribución y el almacenamiento.

-Facilitar el cobro en la caja registradora de tiendas,  supermercados o cualquier establecimiento con lectores y puntos de venta.

-Optimizar la gestión de los inventarios.

-Reducir los errores en la preparación de los pedidos, sus envíos y su facturación.

-Mejorar el registro de todas las ventas y el análisis de desplazamiento de productos en el mercado.

-Automatizar el surtido de las mercancías para que no se presenten casos de desabastecimiento o sobreoferta.

-Permitir la trazabilidad total de acuerdo a las mercancías.

Tomando todos estos factores en cuenta queda mucho más que claro que usar códigos válidos de tipo GS1 es una necesidad para cualquier marca, empresa o emprendimiento; y también que aunque puede que los códigos pirata luzcan como una solución a corto o mediano plazo, así como una caricia al bolsillo y a los ingresos, al final, apenas sea detectado o rechazado, limitará las operaciones del negocio, le quitará fiabilidad y retrasará todo dentro del ciclo de vida del producto. Dicho esto, para evitar algún mal rato lo mejor es ir desde el comienzo por lo fidedigno, informarse muy bien y hacer todo dentro de los parámetros mundiales.